Dos mineras exportan materia prima para Tesla

El magnate mantiene nexos con mineras situadas en el Triángulo del Litio desde hace años. Ahora, pese a la buena onda con Javier Milei no cambió el modelo de negocio. Sigue comprando pero sin ninguna inversión que agregue valor. El antecedente Kulfas, sus datos, la ironía de Morales y la ruta de gigantes de Texas a Shangai.

Desde Salta

En marzo de 2022, gobierno de Alberto Fernández, el entonces ministro de Desarrollo Productivo de la Nación, Matías Kulfas, creía posible que Tesla, la fábrica de automóviles eléctricos de Elon Musk, se instalara en Argentina. Directivos de la firma habían venido a visitar Catamarca y aprovechó para sondearlos. Pero ni entonces ni ahora, pese a las selfies, la buena onda y las promesas que le hizo al presidente Javier Milei, el magnate invirtió un solo peso más en la Argentina. En cambio, continúa, desde hace años, llevándose toneladas de litio como materia prima sin inventir para agregarle valor.

“Había gente de Tesla, compradores de insumos de Livent», repasó Matías Kulfas en diálogo con Salta/12. El exministro recordó tramos de la conversación que mantuvo con ellos el 8 de marzo de 2022. Eran enviados por Elon Musk a Catamarca. En ese momento, la minera estadounidense anunciaba el Proyecto Fénix en Salar del Hombre Muerto, inversiones por más de mil millones de dólares para elevar considerablemente su producción de carbonato de litio.

Los de Tesla le comentaron a Kulfas que la automotriz estaba relocalizando componentes estratégicos que fabricaban en China, para instalarlos en Estados Unidos y México. El ahora exfuncionario nacional advirtió en esa ocasión la oportunidad para probar con un centro al área chica. «Les pregunté si Tesla estaba dispuesta a invertir en una fábrica de automóviles en Argentina”, dijo sobre esas factorías de enormes dimensiones que, en su neojerga, Musk denomina gigafábricas. “Me contestaron que difícilmente –siguió Kulfas–, pero que podrían llegar a evaluarlo en un futuro, sin decirme cuándo, y tal vez para fabricar aquí algún componente». Eso fue todo. No brindaron más detalles y la conversación se diluyó para siempre

Los antecentes

Kulfas subrayó en la entrevista con este diario que «Tesla no tiene inversiones en Argentina”, y que por ese motivo aquel viaje de sus directivos a Catamarca tuvo por objeto “asegurar suministros de litio». Es decir, el lito para su producción de baterías a miles de kilómetros de acá. Ese día, Livent anunciaba que, con la inyección económica en su planta de Catamarca, la producción pasaría de 20 mil toneladas anuales a 60 mil. Un cambio radical.

El exfuncionario también repasó un diálogo anterior a la visita de los ejecutivos de Tesla a la Puna catamarqueña. Fue una charla con Paul Graves, en ese momento CEO de Livent Corporation, durante un panel virtual que transcurrió en abril de 2021. “Él consideraba imposible desarrollar la industria de autos eléctricos en Argentina o en Brasil, por los requerimientos de las baterías ion litio», aseveró el exministro. En ese webinario, que justamente se denominaba “La industria argentina del litio y su papel en la transformación de la matriz energética global”, Kulfas había marcado la cancha. O lo había intentado. Entre los participantes -entre los que estaban los tres gobernadores de las provincias del Triángulo del Litio– afirmó que la estrategia del gobierno nacional pasaba tanto por la industrialización del litio como por integrar al país al desarrollo tecnológico de la electromovilidad global.

Una relación de larga data

La conversación entre el funcionario nacional y los enviados por Elon Musk a la Puna confirmó que Tesla mantiene con la actual dueña de Proyecto Fénix, la empresa Arcadium Lithium, una relación de larga data. No empezó con Milei. Así lo ratificaron a Salta/12 desde la propia empresa. «¿Desde cuándo mantienen acuerdos con la automotriz de Elon Musk?», consultó este diario a la minera. “La fecha exacta no es pública, pero se puede decir que hace más de una década cuando Livent formaba parte de FMC. También fuimos uno de los primeros proveedores importantes de Tesla”, respondieron por mail.

Minera del Altiplano era el nombre de la filial local de FMC Corporation, la empresa norteamericana que comenzó a explorar litio en Salar del Hombre Muerto en 1996. La minera visibilizó su acuerdo con Tesla después que FMC finalizó el proceso de separar la parte agroindustrial de la química. En un reporte del segundo cuatrimestre de 2020, la minera citó en modo telegráfico: “Livent amplió su acuerdo plurianual de suministro de hidróxido de litio con Tesla hasta 2021, con el compromiso de volúmenes mayores que en 2020. Livent continúa discutiendo el marco para una asociación de suministro a largo plazo con Tesla más allá de 2021”.

De Jujuy a Shangai

Si Elon Musk mantiene intereses en la Puna, desde hace años y directamente relacionados con Tesla, se puede seguir esos tentáculos por la transformación del carbonato de litio que ocurre fuera del país. Es bajo esa forma que el mineral argentino pasa a los fabricantes de las baterías ion litio que dotan de movilidad eléctrica a los autos del magnate. Panasonic las fabrica en tres de las cuatro gigafactorías de Estados Unidos, y Contemporary Amperex Technology Limited (CATL) en la de Shangai, China.

En Norteamérica, adquiere el recurso listo de la planta de Arcadium Lithium –fusión de Livent con la minera australiana Allkem– ubicada en Bessemer City, Carolina del Norte, operativa desde 1954.

En China, Tesla abrió una gigafábrica en Shangai en 2019 y desde entonces se adapta a las condiciones que le impone la República Popular. En parte, los insumos productivos de la factoría en el gigante asiático llegan desde Minera Exxar, ubicada en la cuenca jujeña de los Salares de Olaroz y Cauchari. Ganfeng Lithium, que tiene una participación mayoritaria en ese emprendimiento minero, es la proveedora de Tesla desde 2018. Lo confirma su web, que informa que ese año firmó un acuerdo de cooperación estratégico con la automotriz de Musk para proveerle hidróxido de litio de alta calidad para sus baterías ion litio. Ese contrato de 2018 fue renovado en 2022, hasta 2025. Ganfeng Lithium transforma el carbonato de litio jujeño en hidróxido de litio en su planta de Juangxi, 1600 kilómetros al oeste de Shangai.

Sin embargo, en territorio del gigante asiático, es CATL la fabricante de sus baterías. Aunque no lo confirmaron ni Ganfeng Argentina ni el sector comercial de la Embajada China en Buenos Aires, es plausible suponer que el hidróxido jujeño que procesa Ganfeng Lithium en Juangxi viaja primero a alguna de las dos plantas de CATL en China (Yibin y Ningde) antes de llegar a los Tesla que Musk produce en China. Como anécdota, en abril de 2022 el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, le mandó un mensaje a Elon Musk por medio de la red social X invitándolo a invertir directamente en el Triángulo del Litio. El gobierno jujeño tiene una participación en Exxar a través de la estatal JEMSE.

La hipótesis del salar catamarqueño

Los directivos de Tesla que visitaron Catamarca en 2022, ¿evaluaban la participación accionaria de Musk en el Proyecto Fénix? Se trata de una planta madura, que exporta desde Argentina carbonato de litio no sólo a Estados Unidos, también a Bélgica, Inglaterra y China. En este último destino, inauguró una fábrica de hidróxido en 2017 en la ciudad de Rugao.

La conjetura no parece descabellada si se unen otros factores. En setiembre de 2022, meses después de la visita de Tesla a Catamarca, directivos de esa automotriz se reunieron en Washington con el gobernador de Salta, Gustavo Saénz, y los mandatarios de Catamarca, Raúl Jalil, y de Jujuy, Gerardo Morales. Según el gobierno de Salta, presentaron en rueda dirigida a inversores privados, planes estratégicos y alternativas en cada provincia. Al año siguiente, en 2023, Tesla hizo público su proceso de integración vertical con el objeto de abaratar costos, puntualmente, con la intención de participar en la cadena de suministros de insumos claves para la empresa, como el carbonato de litio. Por ese punto el Proyecto Fénix sería estratégico para Tesla: podría achicar eslabones en su fábrica en China, y al mismo tiempo, en las de sus gigafactorías de Estados Unidos. Incluso también, en la de Berlín.

Recientemente, en setiembre de 2023, Tesla abrió una filial en Chile, aunque sólo para importar automóviles. Significa un primer paso bien al sur del continente, que anticiparía el posible acierto de la hipótesis. Si bien no abrió el juego a la exportación del mineral, desde el Proyecto Fénix en Catamarca la minera ya transporta el carbonato de litio embolsado por vagones de carga que se movilizan desde la Puna de Argentina por las vías del Ramal C-14 hasta el puerto de Antofagasta en Chile.

Así las cosas, Elon Musk obtiene materia prima industrializada para su automotriz desde Argentina por medio de proveedoras mineras privadas que, además, le reditúan muy poco al país. Ni antes ni ahora, con su amigo Milei en la presidencia, invierte para agregar valor en territorio nacional.