La ciencia está comprometida a encontrar nuevos beneficios para los hábitos que influyen de manera positiva en en la salud y el bienestar de las personas. Así lo manifestaron expertos de Estados Unidos, quienes realizaron un informe que demostró que una dieta sana "se asocia con una mejora en la condición física en los adultos de mediana edad".

La investigación, realizada por científicos de la Universidad de Vanderbilt; del Centro Médico Beth Israel Deaconess de Boston; de la Universidad de Boston y de la Universidad de Michigan, fue publicada en la revista European Journal of Preventive Cardiology.

Uno de los autores del trabajo, el doctor Michael Mi, explicó que el estudio proporciona "algunos de los datos más sólidos y rigurosos hasta el momento para respaldar la afirmación de que una mejor dieta puede conducir a una mejor forma física", asegurando que "la mejora en el estado físico que observamos en los participantes con mejores dietas fue similar al efecto de dar 4.000 pasos o más cada día".

Según el informe, uno de los indicadores analizados fue la aptitud cardiorrespiratoria, la cual refleja "la capacidad del cuerpo para proporcionar y usar oxígeno para el ejercicio, e integra la salud de múltiples sistemas de órganos, como el corazón, los pulmones, los vasos sanguíneos y los músculos. También es uno de los predictores más poderosos de longevidad y salud".

Una dieta sana se relaciona con la forma física y la aptitud cardiorrespiratoria
Los expertos convocaron a 2.380 personas para que se sometieran a una prueba de ejercicio "de esfuerzo máximo" en un cicloergómetro, una bicicleta fija diseñada para realizar pruebas cardiovasculares. Por otro lado, los participantes completaron un cuestionario para relevar la frecuencia con la que consumían ciertos alimentos.

Según el informe, las dietas de mejor calidad se basaban en el consumo de verduras, frutas, cereales integrales, frutos secos, legumbres, pescado y las grasas saludables, mientras que limitaban las carnes rojas y el alcohol. Tras los procedimientos, se examinó la relación entre la calidad de la dieta, la forma física y los metabolitos, sustancias producidas durante la digestión y liberadas en la sangre durante el ejercicio.

"Nuestros datos sobre metabolitos sugieren que comer de forma saludable se asocia a una mejor salud metabólica, lo que podría ser una posible vía que conduzca a una mejor forma física y capacidad para hacer ejercicio", destacó Mi, y agregó: "En los adultos de mediana edad, los patrones dietéticos saludables se asociaron fuerte y favorablemente con la forma física, incluso después de tener en cuenta los niveles de actividad habituales. La relación era similar en mujeres y hombres, y más pronunciada en los menores de 54 años que en los adultos mayores".

Igualmente, Mi enfatizó en que el estudio fue observacional, y que "no se puede concluir que comer bien provoque una mejor condición física, o excluir la posibilidad de una relación inversa, es decir, que las personas en forma elijan comer de manera saludable". Por otro lado, comentó que "una dieta de estilo mediterráneo con alimentos frescos e integrales y un mínimo de alimentos procesados, carnes rojas y alcohol es un excelente lugar para comenzar".